CAPITULACIÓN DE MENORCA

Memòria Civil, núm. 50, Baleares, 14 diciembre 1986

 

 

 

A bordo del Devonshire se pactó la rendición de Menorca el 8 de febrero de 1939 según el diálogo que reproducimos, mientras en Ciutadella la sublevación de unos oficiales segaba 4 vidas más.

CAPITULACIÓN DE MENORCA

(8 FEBRERO 1939)

Conde de San Luis

Los supongo a Vds. enterados de la situación militar. Nuestro victorioso avance en Cataluña ha hecho caer sucesivamente Tarragona, Barcelona y Gerona, por lo que ya será cuestión de pocos días su ocupación total. En estas circunstancias, la situación de Menorca se hace cada vez más difícil. Hemos acordado ocupar Menorca, pero antes de hacerlo por la fuerza, lo que llevaría consigo la destrucción de una parte importante de la isla y muchísimas víctimas, el Generalísimo, siempre patriota y generoso, me ha autorizado, para que venga aquí a conferenciar con Vds. Sí, dándose cuenta de su difícil situación y de la inutilidad de la resistencia, Vds. no lo hacen, les ofrecemos dos caminos. Marcharse en este momento, o quedarse, contando con la generosidad del Caudillo, que ha de estimar la economía de sangre que Vds. hagan Si resisten, yo tengo la obligación de decirles, que se bombardeará la isla en forma que absolutamente nadie pueda salir de ella, y que dados los medios de que disponemos, no se puede dudar cuál será el resultado del ataque por nuestras fuerzas.

Contestó Ubieta:

Me alegro que haya sido Vd. quien venga aquí. Yo no puedo entregar la isla sin autorización de mi Gobierno, y pienso cumplir con mi deber.

Refugiados menorquines a bordo del "Devonshire"

Conde San Luis.

Yo no vengo aquí a pedirle a Vd. que haga ninguna traición. Le hago ver lo inútil de la resistencia, las muchas víctimas que produciría y los cuantiosos daños materiales, y después de haberse batido, una rendición no es deshonrosa. Por otra parte, la mayoría del Gobierno ha pasado a Francia y desde allí es muy fácil dar órdenes de resistir hasta perder la vida, los demás. En ninguna de las ciudades que se han tomado, hemos encontrado los cadáveres de los directivos, pero si, muchos de los infelices que se les obliga a resistir. Prieto se marchó a América, donde vive muy bien. Aunque ya sé que Vd. es capaz de ofrecer su vida, no sé se los demás directivos de la isla están dispuestos a lo mismo por una causa que ya tienen perdida. En las guerras hay vencedores y vencidos, y hay que saber perder. El Caudillo será generoso con los que no hayan cometido crímenes

El Maquinista San Martín

Lo que más admiración me ha producido en esta guerra, han sido los defensores del Alcázar de Toledo. Cuando se les ha intimado a la rendición, han contestado que lo tratasen con el Gobierno de Salamanca. Nosotros decimos lo mismo y estamos dispuestos a cumplir la palabra dada a nuestro Gobierno. ¿Si el General Franco le hubiese conferido la defensa de una Plaza, la entregaría Vd. sin resistencia?

Conde San Luis

El caso del Alcázar de Toledo es totalmente distinto a éste. Allí, nuestras tropas se iban aproximando día por día hasta que pudo ser socorrido, pero aquí el Ejército rojo de Cataluña, en franca derrota, entra en Francia entregando las armas y se aleja más que Vds. Respecto a la pregunta, le contestaré que ahora cumpliría exactamente lo que me ordenase el Generalísimo Franco, pero que si viese a éste huir a Francia con su Estado Mayor y con la mayoría de sus ministros, comprendería la inutilidad de derramar más sangre. Piénselo Vds., consulten con otros elementos de la isla, tómese las horas que necesiten para reflexionar. Para un rompimiento, siempre están Vds. a tiempo. Vean la gran responsabilidad que contraen llevando este pueblo a la ruína.

El gobernador militar de Menorca Ubieta saluda al capitán Muirhed a su llegada a bordo de "Devonshire"

El señor Ubieta

Consultaremos a nuestro Gobierno y si no contesta ya le daré a Vd. una contestación a las siete de la mañana

.....

El día 8 de febrero, a las diez, vinieron a bordo. Ubieta, San Martín, Mercadal y Valbuena (Comisarios Políticos). Reconocieron que la resistencia era inútil y había mucha gente que no la quería; otros ni estaban dispuestos a ella. Acordaron capitular. Ubieta se puso en pie y entregó su pistola (que conservó). Pedían garantías para los elementos directivos. Contesté que aquellos que no hubieran cometido crímenes, podrían refugiarse con sus familias en el barco inglés. Creí conveniente que se nombrara cuanto antes una persona que se hiciera cargo del mando de la isla hasta que se resolviese la situación. Escribí para ello una carta al coronel retirado Usseleti, de quien me hablaron como persona independiente y con autoridad. A esa misma hora se puso un radio al Comandante del destructor inglés en Palma, para que los trasladasen a su cónsul, y decía así: "Tengo a bordo gobernador y comisarios. - Gestiones, entrega - Se va nombrar una autoridad por Conde San Luis y éste pide preparen fuerzas de desembarco para la ocupación.

(Narración del Conde de San Luis, Fernando Sartorius a la revista "Aquí estamos")