Habló “Manitas” y dijo … ¡mu!

El Obrero Balear  892 / 5/04/1919

 

De veras me sorprendió el que el cívicoManitas” después de acatar la pastoral del Obispo, le sea permitido ocuparse de mi artículo, aparecido en periódico como EL OBRERO BALEAR,  cuyo olor a bolcheviqui y a hereje no puede ser nada grato a las santas narices de un creyente.

 

¿En qué quedamos? Se puede o no se puede leer EL OBRERO BALEAR sin que caiga fulminante la excomunión sobre el reo de lesa pastoral.

 

Admitido que un creyente de mentirijillas, como seguramente será el señor Manitas, para propinarme una filípica hubiérase convertido en descarriada oveja; pero para reproducir truncados unos párrafos, tergiversar unos conceptos, decir unas botaratadas, etc. etc. más le hubiera valido no salirse del redil y así con el ejemplo, haber predicado el respeto al Pastor e infundido a demás ovejas el miedo a una excomunión, cuyos efectos, según me aseguran, son más temibles que una degollina fraguada, no por EL OBRERO BALEAR, sino por el pobre cacumen de Manitas que falto de argumentos para destruir nuestra tesis, se recrea haciendo venenosas insinuaciones y en patentizar su ignorancia al hablar de esto del dinero amontonado por medios ilícitos.

 

Pues nosotros entendíamos, seguimos entendiendo, que un montón de capital desde la base al vértice procede de la tontería de unos y la bribonería de otros.

 

Y si esto supiese, nuestro caro Manitas, de seguro no le ocurriera hacer argumentos en su propia contra, pues a pesar de las diabluras que ha cometido al escribir su suelto para que resultara pintada, por nosotros, a sus gusto la fisonomía moral del Sr. March, no reparó al hacerlo que al retrato sólo le falta añadir aquello de el que roba a ladrón y poner unos puntos suspensivos si al Manitas le parece. Lo decimos, a eso, porque en la lucha de capitalista a capitalista, de pillo a pillo (perdón por la palabra) la único que puede suceder, es que el más bribón se quede con el dinero del que lo es menos. Nosotros decimos que en ese camino no hay creación de valor, no hay supervalia, no hay el verdadero fraude que se comete con el obrero no pagándole íntegro el trabajo realizado. Si le parece, al Manitas me refiero, añada esto a aquello de la fisonomía moral.

 

Para acabar:

 

Decíamos ayer, decimos hoy, diremos mañana que combatiremos a todos los capitalitas: pero como nosotros nos preciamos de justos y queremos premiar a cada cual según sus obras, llevamos mentalmente algo así como una cuenta corriente a cada capitalista, para que llegado el día de la degollina, invención de Manitas, saber a que atenernos.

 

Naturalmente que el Sr. March tendrá en su Haber, como primer partida de crédito, los 20.000 del ala, y si, como es de esperar, la Casa del Pueblo logra cobijar, reunir y preparar el ejército bolchevique se convierte en un serio peligro para los burgueses y sus burguesas de tal modo que les haga, como aquel que dice, perder la cabeza, en este caso, perdonaremos la suya al Sr. March.

 

Si por el contrario el haber de este Sr. no alcanza a tanto tal vez nos veamos en el trance espeluznante de dejarle calvo al podrecido Verga.

 

De veras hay para regocijarse con los sueltos del Manitas.

 

J. Monserrat Partes.

 

Llucmayor Marzo 1919

 

EL OBRERO BALEAR 892

5 de abril de 1919