El salto de Goded a Barcelona

Memoria Civil, núm. 10, Baleares, 9 marzo 1986

Miquel Durán

Para el salto a Barcelona Goded utilizó un hidro ya que al Auditor  Zaforteza el día 17 se le ordenó por parte del comandante M. Torres que se trasladara a Mahón y entregara un mensaje cifrado al General Bosch, con el encargo verbal de activar el traslado de la escuadrilla de hidros. Día 18 a los 11 Zaforteza entregaba las órdenes cifradas a Bosch y a las 13 recibía la contestación también cifrada, pero su insistencia para que los hidros emprendieran vuelo hacia Mallorca encontró más dificultades, ya que el Gobierno ya había ordenado por la mañana del mismo día 18 que la escuadrilla saliera para San Javier, aunque se habían excusado de hacerlo. Pero ante la insistencia gubernamental de aquella misma tarde se tuvo que alegar que no se disponía de tiempo suficiente para arribar con luz solar. Pese a todo Zaforteza siguió insistiendo, lo que motivó que Bosch mantuviera una entrevista con la Aeronáutica con el almirante Pascual de Pobil, que al prolongarse movió al Auditor a expresar al Alférez de Aviación Martínez de Velasco que Goded deseaba contar con los aviones aquel mismo día. El aviador se mostraba ya dispuesto a zarpar a la primera orden, sin embargo diez minutos más tarde el general Bosch hacía partícipe a Zaforteza de la negativa del Almirante, pero añadiendo que saldrían a las 6 del día siguiente -día 19- para dirigirse a San Javier, y que al sobrevolar Palma el aparato pilotado por Martínez de Velasco registraría una avería y amerizaría, Entonces Zaforteza solicitó trasladarse a Mallorca a bordo del hidro en cuestión, denegándosele ante la imposibilidad de justificación.

El general Goded antes de partir hacia Barcelona

Incerdidumbre por los submarinos

La posibilidad de quedar aislado la había contemplado Goded hasta el punto de que al conocer el levantamiento de las guarniciones de África, ordenó a un oficial de Estado Mayor el traslado al Puerto de Sóller para avisar a la flotilla de submarinos, que había entrado en aquel puerto el día anterior, que en vez de hacer rumbo a Mahón se dirigiera a Palma; pero llegó tarde el emisario y los submarinos por Pollensa alcanzaron Menorca, en donde el General Bosch, por orden de Goded, les obligó a trasladarse al Puerto de Palma.

Así el jefe de la flotilla a las 17,45 desde el B-4 comunicaba al gobernador militar de Mallorca: Espero llegar esa entre 10 y 11 noche, pese a que la transmisión desde Muleta no se efectuaría hasta las 18,5. Y en la mañana del 19 los submarinos abandonarían el Puerto de Palma, informando al jefe de la Flotilla Isidro Sáez al Comandante Militar: Me hago a la mar inmediatamente por considerar permanencia en este puerto perjudicial para la dotación.

Hidroavión militar como el utilizado por Goded para trasladarse a Barcelona

 

Domingo 19. 04'15 h.

Empezaron las operaciones en la Aeronáutica de Mahón, mientras el Auditor mallorquín se aprestaba a regresar por mar, alcanzando el Puerto de Alcudia a las 15 y llegando a Palma sobre las 19, aguardándole cerca de las estaciones de FFCC un cabo y un soldado que le hicieron entrega del nombramiento indirecto de alcalde de la ciudad.

Según relato de Ramón Serrano Suñer en sus Memorias, Franco desconfiaba de Goded y vivía respecto a él en una tensión de rivalidad a la que Goded correspondía.

9 horas

Entretanto el General Goded se disponía a salir para Barcelona, recorriendo antes la ciudad acompañado del jefe de Estado Mayor Teniente Coronel Garrido de Oro, a fin de comprobar in situ la distribución de fuerzas y la posición y custodia de los edificios públicos. Y dispuesto ya a dejar las islas entregó el mando al Coronel Díaz de Freijó hasta la llegada del General Bosch desde Menorca. Goded advirtió al coronel que no era obligatorio declinar el mando en el más antiguo, pues no sólo no le inspiraba carácter para actuar -según una declaración de la Causa del Mando - sino que cuarenta y ocho horas antes se había quejado de que Díaz de Freijó llebaba quince días sin aparecer por su despacho. Lo cierto es que el veterano Coronel solicitó el mando, y que Goded espetó que era necesaria la energía, de modo que debía comenzar fusilando a un jefe del comité de huelga cada media hora, como le recalcó que debía enviarle tropas tan pronto como se las solicitara.

Ni el comité de huelga fue hallado, y aunque se solicitó el envio de la ayuda solicitada, esta no se expidió.

11 horas

El general salió en hidro no habiendo recibido según Elviro Sans un despacho en el que tal vez se le informaba que el Movimiento había sido descubierto por la Generalitat. ¿Hasta qué punto hay que relacionar esta sospecha con las gestiones infructuosas llevadas a cabo por un emisario de Goded cerca de Azaña?

Ante un Consejo de Guerra, los generales Fernández Burriel (de paisano) y Goded (de uniforme) escuchan la sentencia de muerte inmediatamente ejecutada.

 

12 horas: en Barcelona

Goded una vez enfilado rumbo a Barcelona llegó sin novedad según el mensaje del piloto al Jefe de Estado Mayor de la Comandancia de Baleares, donde se registraron también comunicados del general al de la 5a. Divisón a las 14,15, al Comandante Militar de Baleares solicitando envío de un buque con material de artillería a las 16, y finalmente un mensaje que indicaba se hallaba en situación crítica teniendo en contra a la Guardia Civil y pidiendo refuerzos a las 18.