EL MUNDO/ El Día de Baleares publica una serie de tres capítulos con las memorias inéditas del capitán Luigi Mancini, un militar italiano que se presentó voluntario para luchar en la Guerra Civil Española y fue destinado a Mallorca.

El periodista de este diario, Manuel Aguilera, contactó con su hijo en Roma y sacará a la luz su excepcional legado compuesto por decenas de fotografías y unas memorias tituladas Un año en Mallorca.

Mancini cuenta el secretismo con que eran trasladados los italianos a Mallorca, cómo les cambiaban el nombre y el tipo de vida que llevaban en su nuevo destino. Su misión se centraba en defender la isla y ayudar a las autoridades franquistas a mantener el orden. Este oficial no vivió escenas de represión porque cuando llegó, a finales de 1937, ya prácticamente no había fusilamientos y el conde Rossi era sólo un mal recuerdo.

En su archivo hay muchas imágenes y relatos de los combates aéreos en el cielo mallorquín, el bombardeo del levante español, la construcción del aeropuerto de Son Sant Joan y los bombardeos que sufrió Palma, especialmente la zona del puerto.

Mallorca supuso la primera «aventura» para este oficial que después viviría la II Guerra Mundial. Lo vivido en la isla le dejaría marcado para siempre, tanto a él como a su familia

EL MUNDO 04/12/2010