Hundimiento del crucero Baleares Memoria Civil, núm. 45, Baleares, 9 de noviembre 1986
EL COMBATE NAVAL
PARTE DEL JEFE DE LA FLOTA REPUBLICANA
A las 0,45 horas del 6 de marzo de 1938, el grueso de la flota avistó a los crucreros facciosos "Baleares", "Canarias" y "Almirante Cervera" frente al cabo de Palos, con los cuales no pudo establar combate porque desaparecieron rápidamente. El "Sánchez Barcáiztegui" disparó dos torpedos sin resultado.
A las 2,15 horas fueron de nuevo avistados los tres cruceros rebeldes. En el acto se entabló violento duelo de artillería a distacias de 4.000 y 5.000 metros. Los destructores atacaron con torpedos de manera fulminante. El "Sánchez Barcaiztegui" lanzó 4 torpedos. 4 el "Almirante Antequera" y 3 el "Lepanto".
A las 2,20 horas se produjo en el segundo buque de la línea enemiga (probablemente el "Canarias", porque es de suponer que el "Baleares" ocupaba el primer lugar, como buque insignia) una formidable explosión. Un torpedo lanzado por los destructores había alcanzado.
Cesó el fuego y la división de cruceros y la segunda flotilla de destructores entraron en Cartagena a las 7,45 horas sin novedad.
Bombardeo del buque torpedeado
Aviones de defensa de costa hicieron varios bombardeos sobre el buque torpedeado por la flota republicana y otros barcos facciosos acudieron en socorro, de todos los cuales se han obtenido fotografías. El bombardeo se hizo en dos pasadas a 3.500 metros.
Destructores británicos en auxilio del Baleares
Los destructores británicos "Kempenfelt" y "Boreas", que realizxan las rutas comerciales del Mediterráneo, encontraron a las 4,30 horas de la mañana al crucero "Baleares"que estaba ardiendo. Los dos destructores ingleses participaron en el salvamiento de la tripulación superviviente. Recogieron a bardo más de un centenar de tripulantes.
El Ministerio de Defensa había pasado comunicación a las embajadas del peligro que constituía acercase al barco torpedeado que sería bombardeado por la aviación leal.
NOTA DEL CUARTEL GENERAL DEL GENERALÍSIMO
En el mar hemos perdido al crucero "Baleares" en un encuentro nocturno en que un disparo afortunado de un torpedero alcanzó uno de sus puntos vitales. Esto es una azar desgraciado de la guerra. Es un nuevo y heróico tributo de guerra que rinde la marina españpola al altar de la Patria. La suerte no permitió que esos marinos supervivieran, sino que se hundieran con el barco para que no pudieran continaur la obra de levantar la potente marina española sobre los restos de la destruida roja.
Rinda España y el mando testimonio de admiración y gratitud hacia las víctimas personaels de la criminalidad moscovita, aunque, a pesar de todo, ello hará que sigamos fuertes en el camino de la gloria en defensa de la Patria y de la civilización cristiana.
La obra de levantar a España se hace a fuerza de duros golpes que nos afirman en nuestro temple. Este inevitable azar nada representa en su ejecutoria ni en el camino del triunfo total.
¡¡Marinos del Crucero BALEARES!! ¡¡Presentes!!
Los destructores rojos, una vez realizada su hazaña, huyeron amparados por la velocidad y por las sombras de la noche. Dos torpederos ingleses acudieron al lugar del suceso, auxiliando a la tripulación y logrando con su esfuerzo salvar a 350 marineros.
Con el barco se hundieron todos sus jefes y casi la totalidad de sus oficiales y el resto de la tripulación, superando todo heroísmo con su comportamiento.
La aviación roja bombardeó, durante el salvamiento a los torpederos ingleses.
LA ESTRATEGIA DEL "BALEARES"
Se cree que el Baleares quiso inciar una maniobra de gran estilo. Se hallaba a cuarenta millas del Cabo de Palos, y la arrojada estrategia imaginada consistía en meterse entre las fuerzas enemigas y la costa. El Baleares iba con las luces apagadas, en la confianza de que su maniobra sería inarvertida. Así, si atacaba la flota roja desde inesperada dirección, ésta se vería obligada a saliar al mar, donde esperaban los cruceros Canarias y Almirante Cervera y de este modo habría sido cazada y ... recuèrada, la flota republicana.
Un superviviente del heroísmo del Baleares ha referido que el crucero nacional se dirigió hacia la flota enemiga y a unos 400 metros lanzó dos proyectiles luminosos ...
Instantáneamente contestaron torpedos y cañonazos, que dieron blanco en la cámara centro. Fue un estampido horrendo, como una explosión en el propio cráneo. Las máquinas quedaron paradas por inutilización de las calderas y el buque quedó completamente a oscuras. Eran las dos y media de la madrugada.
Ferrari-Billoch
Archivo del "Baleares"
ESPECIAL:
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