Antes de que los flechas navales
mallorquines se incorporaran a la
tripulación, en febrero de 1937, el crucero
´Baleares' participó en Málaga en uno de los
ataques contra población civil más
despiadado de la guerra, cómo señaló
recientemente en la tribuna de este diario
el historiador Pep Vílchez. Unos 40.000
habitantes de la ciudad andaluza estaban
huyendo ante el avance de los batallones
italianos cuando fueron sistemáticamente
bombardeados y ametrallados por la aviación
italiana y por la artillería que estaba
emplazada en la cubierta del ´Baleares´ y
del ´Almirante Cervera´. No se conocen
cifras exactas del número de fallecidos,
pero las estimaciones no bajan de los 3.000
muertos, todos civiles, además de numerosos
heridos.
Diario de Mallorca