Francisco Roca Primer de Maig 1911 NUESTRA FIESTA Hoy se celebra nuestra fiesta grande, la fiesta universal del 1º de Mayo. Cesan en su función los instrumentos de trabajo para dar lugar a que los explotados que los manejan, unidos por santo lazo de amor, canten un himno a la redención de su esclavitud. Llegó, por fin, el día querido que todos los obreros del Universo esperamos con entusiasmo, día que se llamará en otros tiempos no lejanos, aniversario del triunfo de los trabajadores. En este día todos los trabajadores que tienen ya exacta conciencia de la trascendencia y significación de la celebración de la fiesta del trabajo, pueden en manera alguna permanecer callados y dan cuenta de la alegría que encierra su corazón. La fiesta del 1º de Mayo no significa lo que muchos burgueses dicen, que es un día de holganza; para nosotros tiene más altos fines y está llamada a resolver el problema más grande que resolverá la humanidad así lo declaró el Congreso Internacional Socialista de París, no solo para condensar las aspiraciones del proletariado mundial y dar cohesión a sus fuerzas, sino para desterrar el espíritu estrecho de antagonismos entre nacionalidades y razas. Bien definido quedo allí y confirmado posteriormente el Bruselas, Zurich y Londres por la representación intelectual del Socialismo, el conceptos de las guerras y de las nacionalidades que dividen a la Humanidad. El fundamento de toda guerra reside principalmente en la cuestión económica y en su fondo no hay más que intereses que, por otra parte, son diametralmente opuestos a los trabajadores, por esto no queremos nosotros aventuras en Marruecos, no queremos verter una sola gota de sangre ni gastar una peseta; queremos paz, odiamos las guerras, queremos que la Humanidad viva una vida feliz y dichosa. ¡Fatídica misión histórica la del régimen capitalista que falto de solidaridad aún entre sus mismos elementos componentes, se mantiene apoyada por cañones y bayonetas y se agita y da señales de vitalidad entre inmensos lagos de sangre humana de la preciosa sangre de los que han contribuido a crear la riqueza de los pueblos!... Al posesionarse del poder político la clase trabajadora e implantado el Socialismo, éste echará abajo todos los privilegios que siempre ha disfrutado la imperante burguesía, pero para acelerar el advenimiento de tan fausto acontecimientos, es altamente necesario que las masas obreras se instruyan, se capaciten y eleven su nivel moral e intelectual, se asocien sindicalmente y constituyan un fuerte baluarte donde se estrellen los proyectiles de la desenfrenada explotación capitalista, y siguiendo el proceso económico que engendra la lucha de clases entrará de lleno a formar parte del partido Socialista Internacional, ocupando el puesto de combate que le corresponde, laborando para alcanzar días mejores y felices para la Humanidad entera. Saludemos hoy, pues, nuestra fiesta universal del trabajo, y con entusiasmo y alegría cantemos una vez más el himno de los explotados. Palma 1º de Mayo de 1911 Núm. 476, 1 de mayo de 1911
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