Asamblea Socialista – Un manifiesto

La “Agrupación Socialista” de esta capital celebrará una Asamblea magna el próximo sábado día 18 del corriente a las 9 de la noche en la CASA DEL PUEBLO, a cuyo efecto ha publicado un manifiesto-convocatoria explicando los motivos y objeto de la mencionada Asamblea e invitado a la misma a todos los socialistas afiliados al Partido y simpatizantes de nuestras ideas.

De dicho manifiesto es el siguiente párrafo que copiamos:

“CAMARADAS: Seamos hombres dignos de las ideas marxistas y acudamos a la mencionada Asamblea a dar fe de soldados conscientes y disciplinados que se disponen a luchar por la causa socialista.

¡Viva el Partido Socialista!

¡Viva la unidad obrera!

UN MANIFIESTO

De color de sangre, como para demostrar que ésta llegará al río con la embestida que van a dar a la burguesía los neocomunistas, ha salido a la luz una hoja impresa de los separatistas de nuestro Partido. La hemos leído y releído una porción de veces y aunque hemos llamado en nuestro auxilio a los siete sabios de Grecia no nos ha sido posible entender lo que dice ni lo que su autor o autores pudieran querer que dijera.

Cuando vimos el manifiesto y nos dispusimos a leerlo creímos, tratándose de un partido nuevo, que íbamos a leer un programa y a enterarnos por fin, de los motivos doctrinales o de táctica que pudieran justificar seriamente la separación de Partido Socialista de los elementos que hoy se llaman comunistas.

Pero nada de esto hemos visto. Solamente palabras, palabras y palabras; y huecas todas ellas, sin sentido, sin expresar un pensamiento, ni una ida, ni nada. Ruido, nada más que ruido, esto es todo lo que contiene el documento “comunista” que comentamos.

Si algo se destaca en él es la populachería, el sonido rimbombante y la ignorancia más supinamente cras. ¿Cómo van a temblar de … risa los burgueses cuando lo lean.

Lean, lean los obreros el manifiesto de los neocomunistas, el primer documento público del llamado partido nuevo y busquen en él una idea, una orientación, un método, una doctrina, algo, en fin, que tenga sustancia, coherencia, sentido común. Dejen a una lado las palabras gordas y las ridículas amenazas y busquen el contenido y la médula del manifiesto y verán como todo se reduce a música de trompetas de desafinadas.

¡Y pensar que tal montón de disparates se publica en nombre de una idea y de un partido!                               

EL OBRERO BALEAR nº 1007

17 de junio de 1921