NUESTROS MUERTOS

FRANCISCO ROCA

 

En Palma de Mallorca, donde residía, ha fallecido el día 19 del actual el veterano correligionario Francisco Roca.

 

EL OBRERO BALEAR, querido colega de la citada población, da cuenta de su muerte en los siguientes términos:

 

“¡Ha muerto! Sí, el compañero Francisco Roca, el que fue miembro de la Primera Internacional y redactor del semanario La Bandera Roja, el luchado incansable, el fundador del Socialismo mallorquín, el fundador de “La Igualdad”, el que organizó la primera Federación Local de Sociedades Obreras, el ex director y fundador de este semanario y actual administrador, el ex presidente del partido socialista, de la Federación obrera y de cuantos organismos gremiales ha pertenecido, el hombre bueno por excelencia, el creador y alma, en fin, de la organización del proletariado mallorquín, ha dejado de existir.

 

Cuarenta y cinco años llevaba de lucha tenaz entre las filas de la clase obrera, su abnegación y voluntad, su acrisolada honradez y su altruismo le hicieron acreedor al cariño de cuantos le conocieron y trataron. Sus muchas simpatías con el pueblo le llevaron dos veces al Consistorio, desempeñando el cargo de concejal con admirable honradez y actividad en defensa de los intereses del pueblo.

 

En el transcurso de sus luchas políticas y económicas no cosechó más que sacrificios y sinsabores. Víctima de las persecuciones burguesas, tuvo que sufrir varios procesos y una condena de seis meses de arresto, sin que jamás se entibiaran sus convicciones y entusiasmos por la justa causa del trabajo.

 

Momentos son estos en que la pluma enmudece ante la tristeza y el dolor que embarga nuestro corazón. Era tan afable y tan querido para nosotros el compañero Roca, que por largo tiempo perdurará en nuestra mente su recuerdo.

 

Con la muerte de tan querido correligionario pierde la clase obrera y el Socialismo uno de sus más consecuentes y entusiastas apóstoles. La huelga que deja será difícil de borrar, pues, a pesar de su edad avanzada y de su quebrantada salud, todavía laboraba con actividad en el desempeño de diferentes cargos; jamás estuvo reacio a aceptar el sacrificio por el bien colectivo, siempre pesaron sobre él infinidad de trabajos que, voluntariosos y abnegado, soportaría con gusto.

 

Su nombre figura en el libro Historia del socialismo español, de Francisco Mora, como uno de los primeros campeones que tuvo la organización obrera en España.

 

Mallorca obrera no podrá olvidar jamás al abuelo (así le llamábamos),  al patriarca de su organización, pues por doquiera que ésta haya brotado se deben en gran parte a la semilla que él sembró.

 

¡El compañero Roca! ¡Quién no ha pronunciado miles de veces este nombre, quién de los obreros mallorquines no le conocía y quién no le recordará siempre con simpatía y cariño!

 

Amargo, muy amargo fue el golpe que recibimos al enterarnos de la muerte de Roca, y más amargo fue aún al enterarnos también de que su familia, que conocía sus ideas y sus sentimientos en materia de religión, haya querido inferir un ultraje al difundo, disponiendo, contra la voluntad del finado, que se le enterrara católicamente. Contra esa injuria con que se ha querido manchar el nombre e historia del compañero Roca, contra ese atropello cometido en sus ideas y en su voluntad, nosotros protestamos con la mayor energía.

 

Ha muerto nuestro querido compañero, el abuelo nuestro, cuya vida ha sido la de un valiente y esforzado luchador.

 

Que su ejemplo le sigan todos, pues no proceso, ni arrestos, ni otras clases de trabas con que las clases burguesas procuraron ponerle en su continuo batallar a favor de la clase obrera, pudieron entibiar su fe en el ideal de redención.

 

Sigamos su ejemplo, único medio que nos queda para perpetuar su memoria.”

 

De todo corazón nos asociamos al dolor que en estos momentos embarga al al proletariado mallorquín ante la pérdida de tan excelente camarada.

 

Entierro de Roca

 

En el mismo número de EL OBRERO BALEAR hallamos las siguientes líneas, relativas al entierro del mismo correligionario:

 

“A las ocho de la noche estaba anunciada la conducción del cadáver, y ante la casa del finado se reunió un numerosos público.

 

Una vez colocado aquél en el coche mortuorio, el público se colocó a los lados, y los miembros de la Juventud socialista, con una mano apoyada en el coche y descubiertos, fueron siguiendo la ruta señalada.

 

El público siguió hasta el cementerios y una vez allí los asistentes pasaron ante el cadáver, y el compañero Marí pronunció unas palabras que estuvieron acertadísimas.

 

Se acompañó el cadáver hasta el depósito y una vez allí volvió el público a pasar ante él., emprendiendo luego el camino a la capital.

 

Según El Correo de Mallorca, los socialistas quisimos despojar arbitrariamente el carácter católico al acto, y a fe que más les valiera callar, porque los curas que se creían acompañar al cadáver hasta su última morada hicieron un papel muy triste y hasta muy ridículo.

 

¿Qué dice a ello El Correo de Mallorca?

 

Quien obro de una manera arbitraria fue su familia, que conociendo las ideas del finado, su historia, sus campañas en cuestiones religiosas, después de muerto enviara para que se le administrase la extremaunción y profanando su cadáver.

 

El compañero Roca murió socialista, y si hubiese llegado a levantar la cabeza, aún sin fuerzas la hubiese emprendido a garrotazo limpio con su familia y con los curas que tanto interés tenían en ello.

 

Los socialistas obramos correctamente, cosa que no pueden decir los católicos ni la familia del finado.

 

Pésames

 

La Igualdad”, Sociedad de zapateros de Palma, acordó en junta general constara en acta el sentimiento por la muerte del compañero Roca, fundador y socio de dicha Sociedad.

 

-La Juventud socialista de Manacor también nos envía el pésame.

 

-         Los socialistas de Lluchmayor sentimos hondamente pérdida ardiente luchador Roca. Nos sumen al pésame.- Antonio García, presidente.

 

EL SOCIALISTA

Nº 2.868, 28 de marzo de 1917